29.10.07 Calatrava y su Puente.

Una de las comidillas que se escucha por el Botxo (así es como llamar a Bilbao los bilbaínos) es que el famoso puente de Calatrava está dando más problemas y sustos que alegrías. Lo que debería ser un punto de unión entre dos orillas (esa es la función principal de un puente) se ha combertido en el hazmerreir de la cuidad, por no llorar, ya que es un puente bonito, donde los bilbaínos lo conocen por su suelo, unos porque lo han besado (por las caídas) y otros tantos sólo se fijan en el suelo para no besarlo pues los días de lluvia el maravillo suelo de crital resvala que ni pa'di0s. Ahora ha salido con que han destrozado la belleza de su puente al ponerle una pasarela. Como dicen algunos periódicos, Calatrava no ha sentido que se lesionaba su obra, sino su ego.
Si tanta obra de arte es, si tanto cariño le tiene, que se lo lleve. Yo pienso que sería como una escultura de Botero, esta puede estar expuesta en la calle, y cuando se considere que ya no debería estar allí donde esté, pues nada, el escultor se lo lleva a casa, o el propietario de la misma se la lleva a otro lugar.
Si Calatrava quiere tanto su obra que se la lleve a su casa, pero como la "obra" es propiedad del ayuntamiento, que le pague al ayuntamiento un nuevo puente para ponerlo es su lugar.